Con algo más de 9 kilómetros de longitud, esta ruta es el recorrido intermedio de la Laguna de Padul. Su nombre evoca otro de los grandes mamíferos del Pleistoceno cuyos restos fósiles se han encontrado en los depósitos de turba: el rinoceronte lanudo.
Este sendero nos permite explorar la diversidad de ambientes que caracterizan la Laguna de Padul. Atravesamos zonas de carrizal denso, áreas de transición con matorral mediterráneo y espacios abiertos que nos ofrecen amplias panorámicas del Valle de Lecrín y Sierra Nevada.
La ruta nos muestra la compleja hidrología del humedal, con sus madres y canales que regulan el nivel de agua y configuran diferentes microhábitats. Podemos observar la adaptación de la vegetación a las distintas condiciones de humedad, desde plantas acuáticas hasta especies propias de zonas más secas.
Uno de los aspectos más destacables de este itinerario es la posibilidad de observar perfiles estratigráficos que nos muestran los depósitos de turba acumulados durante milenios. Estos verdaderos archivos naturales han permitido reconstruir la historia climática y ecológica de los últimos 100.000 años.
La Ruta del Rinoceronte Lanudo ofrece al visitante una experiencia completa para quienes buscan una comprensión profunda de la evolución del paisaje y la riqueza natural de la Laguna de Padul.